La importancia de apoyarnos en los demás

Y de saber pedir ayuda.

Hola, ¿cómo estás?

Hace unos días, me decía un paciente que empieza a sentirse bastante solo porque en los últimos años se ha dedicado a trabajar y ha ido dejando de lado las relaciones sociales. Me comentaba que le quedan algunos buenos amigos pero que tampoco les dice de quedar por miedo a que le digan que no. Por miedo a ser rechazado. Y que, por otro lado, tampoco le había contado a nadie que no se encontraba bien. Porque eso significa que es vulnerable y, por lo tanto, débil. ¿Qué opinas de esto?, ¿te sientes identificadx con algo?

Ayer, vi la nueva película de Almodóvar, La habitación de al lado (maravillosa, por cierto). Una de las protagonistas necesita ayuda. Y la petición que hace es bastante compleja. Varias amigas se niegan a ayudarla, pero ella no deja de buscar esa persona en la que poder apoyarse: sabe que necesita a alguien a su lado y no tiene miedo al rechazo (que en cualquier caso, no es rechazo hacia ella, sino hacia su petición).

Como seres sociales que somos, necesitamos el apoyo de otros seres humanos. Ahora más que nunca lo estamos viendo con lo que está ocurriendo en Valencia. Contar a alguien que nos sentimos mal y que necesitamos ayuda, puede que sea mostrar que somos vulnerables (porque resulta que lo somos) pero no que seamos débiles, sino que somos humanos. Y esa ayuda la tenemos que pedir de forma explícita. No podemos esperar que el otro se de cuenta de que la necesitamos. No hay mayor error que la frase que dice: “Si tengo que pedirlo, ya no lo quiero”. Porque presupone que la otra persona es adivina. Y porque además nos incapacita para hacer uso de nuestro derecho a expresarnos.

En definitiva, si te sientes mal, si necesitas desahogarte o algún tipo de ayuda, pídela. No tienes que demostrar que puedes con todo y por supuesto no tienes por qué hacerlo solx.

Como siempre, si te apetece compartir tu reflexión estaré encantada de leerte.

Te mando un abrazo.

Pili ★